En el año 2020 la pandemia por COVID afectó a todos los niveles de nuestra vida diaria. Pero, ¿cómo afectó a las contrataciones durante al año pasado?
Si vemos el volumen total de nuevos contratos, hay una bajada muy notable respecto al año anterior, un 55%. En total se contrataron a 434 trabajadores, por los 955 que se llegaron a contratar en 2019. La noticia positiva, todos los contratos son indefinidos, muy importante para la calidad y para acabar con la temporalidad en el empleo.
En cierto modo, es una bajada lógica por la bestial crisis económica que afecta a todo el país, pero, aun así, la noticia es que no se ha parado de contratar, por lo que la plantilla total no se ha visto afectado, subiendo este año en más de 200 empleados. De todas formas, la cifra es engañosa porque hay que tener en cuenta la absorción en mayo de los 230 empleados de Pragsis, por lo que si descontamos esos empleados hay un pequeño descenso de plantilla.
Si vemos la evolución de la plantilla desde que empezó la pandemia, hay un descenso de empleados hasta agosto, y a partir de septiembre comienza a crecer. Esto es debido básicamente por el aumento de contratos a partir del mes de septiembre.
Respecto a la experiencia de las contrataciones, el 42% son de trabajadores sin experiencia y el 58% restante con experiencia. Aquí también se ha producido un cambio respecto años anteriores, ya que en otros años los trabajadores sin experiencia suponían un 60% de las contrataciones y este año se ha optado por gente con experiencia y de todas las categorías.
¿Cómo ha influido esto en el salario de las nuevas contrataciones? ¿Han subido respecto a otros años por la subida de demanda de perfiles más específicos? Pues depende de la categoría, pero no ha habido una subida media muy apreciable, se sigue pagando lo mismo que otros años, dependiendo mucho del trabajador específico.
¿Y los sueldos de entrada, qué? Aquí podemos diferenciar dos temas.
Por un lado, sigue la desigualdad salarial entre oficinas, como se puede comprobar en los salarios de los nuevos empleados sin experiencia. Hay una diferencia de 3.300 euros entre lo que cobran los empleados contratados en Bilbao y los contratados en Málaga. ¿Cómo puede haber tanta diferencia? ¿De dónde sacan las cuentas? ¿Es que en Málaga regalan la vivienda y está más barata la luz? Está claro que hay dos familias muy diferenciadas en la empresa, las ricas que se cobran un poquillo mejor, los empleados de las oficinas de Alicante, Bilbao, Madrid y Barcelona, y los primos pobres de la familia, que son los empleados de Málaga, Sevilla y Zaragoza.
Y, por otro lado, los salarios de entrada de los empleados contratados son más altos que los de los empleados que llevan muchos años en la compañía. Es triste, pero es así. Eso es lo que valemos para la empresa. ¿Qué opciones nos quedan?, una posibilidad sería irnos de la empresa y que nos vuelvan a contratar, pero seamos serios Señores del consejo directivo, paguen a los empleados de cada categoría, al menos lo mismo que pagan a los nuevos empleados contratados, es de ley.
Nunca seremos una empresa moderna y seria si no acabamos con estas desigualdades salariales entre las contrataciones de mercado y los empleados con antigüedad en la empresa y si no reducimos las enormes diferencias salariales existentes entre las distintas oficinas.
De la diferencia de salarios entre los empleados de Tecnilógica y Accenture, ya mejor ni hablamos.
PESE A LA PANDEMIA, LOS DESPIDOS ESTÁN EN NIVELES DE OTROS AÑOS
En el año 2020 se produjeron 64 despidos, lo que supone un pequeño descenso respecto a años anteriores. Esta cifra es engañosa, ya que sabemos que se han producido “acuerdos” para dejar la empresa, pero estos no cuentan como despidos, así que la cifra total no la podemos saber.
La mayor parte se han cebado con las categorías más altas, sobre todo de las categorías de level 8 y 9, cosa que no se entiende puesto que se han producido muchas contrataciones de estas categorías. Y por oficinas, donde se han producido más despidos son en Madrid y Barcelona.